Etiqueta: Edu Reptil

  • Call me Ishmael

    Call me Ishmael

    Mi obsesión comenzó de la manera en que terminan las mejores historias de amor; con la promesa del reencuentro, por dudoso que este resulte para los amantes que se separan y ven la vida como un tren en marcha en una estación añeja, uno de ellos con mirada lacónica en el andén y otro manteniendo…

  • Caducidad

    Caducidad

    Si se había dedicado a la cartomancia en un programa nocturno de una cadena local de mala muerte era simplemente por diversión. Había pasado por numerosos trabajos a lo largo de su vida, pero este era sin lugar a dudas el más gratificante. Cobraba un sueldo miserable, pero no podía quejarse, la labor que desempeñaba…

  • Scary monsters and nice sprites

    Scary monsters and nice sprites

    [Para una mejor experiencia de lectura, poner de fondo la canción cuando aparece en el relato] Si algo era capaz de acabar con la monotonía de los días y su insoportable carga era el misterio de todo aquello que ocurre a espaldas de la cotidianidad. Cruzaba las calles haciéndose una con las fachadas ennegrecidas por…

  • Ad astra

    Ad astra

    Manuel, estoy http://wahres-sein.de/ de la Humanidad. Quiero hacerla desaparecer en cada uno de mis relatos, cuentos, astras, o viagra coverage canada que escribo. Tengo tantos motivos para detestar a mis congéneres como para amarlos. Es cuestión de días, del pie con el que desciendo de la cama, la temperatura Fahrenheit del café, el primer silencio…

  • Sulloon

    Sulloon

    [Antes de leer el relato, es necesario que veas este vídeo]   While goin’ the road to sweet Athy, hurroo, hurroo… While goin’ the road to sweet Athy, hurroo, hurroo…   Alrededor de su cabeza comenzaba a formarse un pequeño charco, la finísima lluvia que caía estaba llenando el cráter que el peso de su…

  • La Fundación, sci-fi café

    La Fundación, sci-fi café

    Hijos de Asimov, ¡reuníos! Hay una nueva Meca, robótica e iridiscente, para los amantes de la ciencia-ficción en Valencia. Una cueva hi-tech cálida y familiar, una Nostromo aparcada en mitad del barrio de Ruzafa, en la calle Pintor Salvador Abril 29, en misión desconocida. Su piloto, Fernando, a todas luces extraterrestre (o cuanto menos extra-comunitario)…